El equilibrio perfecto entre confort y naturaleza en Potrerillos, Mendoza. Un alojamiento destinado a quienes buscan desconectar del ritmo cotidiano para reconectar con lo esencial.

Una invitación a vivir la montaña sin renunciar al confort.

¿Qué es La Calma Ecolodge?
En un rincón de naturaleza poco intervenida del Dique Potrerillos, La Calma nace como un refugio consciente entre naturaleza, silencio y vistas únicas al Cordón del Plata. Diseñado con respeto por el entorno, ofrecemos una experiencia exclusiva donde el lujo es invisible y lo esencial, protagonista.

Comedor de Cabaña 'La Calma Ecolodge', iluminado naturalmente con vista el Dique de Potrerillos, en Mendoza, Argentina.

Descubrí lo que nos hace únicos

Tres razones que hacen de nuestro alojamiento una experiencia única:

Paisaje natural y virgen en Potrerillos visto desde La Calma Eco Lodge, rodeado de montaña y vegetación.

Ubicación exclusiva

En la costa menos transitada del dique Potrerillos, con bajada privada al mismo, y vistas que no encontrarás en otros alojamientos de Mendoza.

Interior acogedor del eco lodge en Potrerillos, Mendoza, con diseño cálido y vistas a la montaña.

Confort en plena montaña

Comodidad y calidez en un entorno natural. Cada detalle fue diseñado para convivir en armonía con el entorno natural, sin alterar su esencia.

Vista exclusiva desde la bajada privada al dique Potrerillos en La Calma Eco Lodge.

Experiencias auténticas

Cada actividad está pensada para reconectar con lo simple y lo real. No necesitas más que estar presente para que todo lo demás suceda.

Viví La Calma

Un pequeño recorrido visual por nuestros espacios, paisajes y momentos

Experiencias que inspiran confianza

Nuestros huéspedes nos eligen por la calidez, el confort y la conexión con la naturaleza. Conoce algunas de sus experiencias y descubrí qué dicen sobre nosotros

Prepara tu próxima escapada a La Calma

Consultá disponibilidad y comenzá a planear tu experiencia en nuestro ecolodge. Naturaleza, tranquilidad y confort te están esperando.


Desconectar es el verdadero lujo.